Fundació “la Caixa” buscaba elevar la calidad y coherencia de la experiencia digital en los ecosistemas de CaixaForum Barcelona, CaixaForum València y CosmoCaixa. Los equipos detectaban fricciones en procesos clave —buscador, filtros, navegación, compra y suscripción— que afectaban la conversión y la satisfacción de uso. El reto no era solo técnico: se trataba de alinear la usabilidad y la accesibilidad con el propósito cultural y educativo de los centros, garantizando una interacción más inclusiva y efectiva para públicos diversos.
Aumentar la conversión a entradas y suscripciones.
Mejorar la accesibilidad y la comprensión de los contenidos.
Optimizar la experiencia móvil y reducir fricciones en el proceso de compra.
Alinear las decisiones de diseño y contenido a estándares éticos y de inclusión digital (WCAG 2.2 AA).
Dotar a los equipos internos de una base de evidencias y priorización para seguir mejorando de forma autónoma.
Personas — Escuchamos la experiencia real de quienes usan las webs: realizamos tests con 25 usuarios de cinco perfiles (familias, profesorado, público general, visitantes habituales y nuevos usuarios). Este enfoque permitió entender motivaciones y frustraciones desde la empatía, identificando expectativas y puntos de fricción invisibles en los datos.
Tecnología — Combinamos una evaluación heurística con auditoría AA WCAG 2.2 y test interactivos en Maze. El enfoque híbrido (cuantitativo + cualitativo) garantizó precisión sin perder contexto humano.
Negocio — Priorizamos las recomendaciones según impacto en conversión, complejidad técnica y valor estratégico. Entregamos un backlog claro y accionable, pensado para ser implementado rápidamente por los equipos internos, sin sobredependencias externas.
El estudio se desarrolló en cuatro fases iterativas:
Se identificó un cumplimiento del 70% en accesibilidad AA, con un 30% de áreas a optimizar. Las principales recomendaciones incluyeron:
El informe final transformó una lista de problemas dispersos en un plan de acción tangible y priorizado. Las mejoras proponían un impacto directo sobre tres ejes:
Además, los aprendizajes —como la eficacia de segmentar por perfiles o la necesidad de un buscador semántico— son directamente extrapolables a organizaciones culturales y sociales con ecosistemas digitales múltiples.
El proyecto consolidó una metodología replicable: partir de la empatía con las personas usuarias, aplicar análisis de datos y accesibilidad con rigor, y entregar resultados accionables que fortalezcan la autonomía del cliente. Una práctica que refuerza nuestro compromiso con un diseño digital humano, sostenible y consciente del impacto real.